Durante el pico de la pandemia, los miembros de la comunidad de Ashland comenzaron a preocuparse porque el parque para patinetas del centro REACH Youth Access Center (REACH) estaba siendo ocupado de noche por personas que bebían y hacían grafitis en las paredes.
“El parque era un desastre”, aseguró Daniel Murphy, alguacil adjunto de la oficina del alguacil del condado de Alameda (Alameda County Sheriff's Office, ACSO). “Las familias no querían regresar. El centro para jóvenes cercano estaba preocupado, y las escuelas estaban preocupadas, porque este elemento delictivo estaba como instalado ya”.
El primer instinto del alguacil adjunto Murphy fue no arrestar a nadie, sino comunicarse con las demás agencias de la comunidad y entidades colaboradoras sin fines de lucro para desarrollar soluciones a fin de aumentar la seguridad del espacio. En colaboración con el Distrito de Recreación y Parques del Área de Hayward (Hayward Area Recreation and Park District, HARD), el personal de REACH y el distrito escolar unificado de San Lorenzo, propuso un plan para disuadir los grafitis agregando puertas de entrada para vehículos en el estacionamiento, de modo que los autos no pudieran acceder de noche cuando se producen los delitos, y aumentando la potencia en vatios de las luces del estacionamiento. También trabajó con la división de patrullas para aumentar las patrullas de noche y proactivamente durante el día.
El plan funcionó. Los grafitis fueron disminuyendo, con lo cual se logró ahorrar aproximadamente $10,000 en costos para volver a pintar.
El parque de béisbol cercano de Ashland Little League, que se encuentra junto a la escuela Edendale Middle School, también sufría vandalismo con grafitis, y los campos estaban en mal estado. El alguacil adjunto Murphy tomó nuevamente la iniciativa. Primero, escribió una propuesta al alguacil Gregory Ahern para solicitar fondos destinados a mejorar el parque de béisbol. El alguacil aportó $25,000 para renovar los campos e instalar sistemas de riego, de modo que los jóvenes locales los encontraran más atractivos para jugar allí. Luego, el alguacil adjunto Murphy comenzó a trabajar con el artista de la comunidad Bobby Arte para diseñar conceptos para un mural que se pintaría en el parque de patinetas. Los murales coloridos desalientan los grafitis, especialmente cuando participan artistas y jóvenes locales. El mural previsto para el parque de patinetas incorporará imágenes de skateboarding y otras actividades que serán atractivas y harán eco en la comunidad de usuarios.
El enfoque del alguacil adjunto Murphy para resolver los problemas de seguridad pública, la ACSO lo ha empleado con orgullo durante casi dos décadas. Se trata de un marco de políticas impulsadas por la comunidad y basadas en proyectos, que confiere a las autoridades policiales la flexibilidad de resolver problemas de forma creativa y colaborativa. Se denomina Community Capitals Policing (Marco de Capitales Comunitarios) y se basa en entablar relaciones con jóvenes y adultos de la comunidad, para que participen en actividades que se basan en sus fortalezas culturales existentes. Los alguaciles adjuntos de la oficina de servicios para jóvenes y familias (Youth and Family Services Bureau, YFSB) de la ACSO están capacitados para prevenir delitos, y consideran que la aplicación de la ley y el arresto son recursos de última instancia.
“Community Capitals Policing no solo es un enfoque proactivo para detener los delitos, sino que además busca las causas que llevan a los ciudadanos a cometer los delitos”, explicó el alguacil adjunto Murphy. “Desarrolla asociaciones dentro de la comunidad para expandir la cultura comunitaria preexistente”.
El alguacil adjunto Murphy ha trabajado en diversas capacidades en la oficina del alguacil del condado de Alameda, más recientemente como oficial de seguridad escolar (School Resource Officer, SRO). La ACSO ha proporcionado SRO a las escuelas del área no incorporada del condado desde 1989. En la actualidad, un sargento y ocho alguaciles adjuntos trabajan en 35 escuelas en los distritos escolares unificados de San Lorenzo y Hayward, así como en el centro REACH Ashland Youth Center.
En Edendale Middle School, el alguacil adjunto Murphy trabajó con los administradores, el personal, los docentes, las familias y los estudiantes de la escuela para crear un ámbito y una cultura escolares más seguros. Su labor incluía ayudar a identificar a jóvenes en riesgo y a conectarlos con los recursos que necesitaban para tener éxito y con actividades recreativas que ofrecen una salida positiva.
“Caminé por los pasillos, saludando a los niños, saludando al personal de la escuela, trabajando con las escuelas para ser más un asesor que un oficial de policía”, aseguró el alguacil adjunto Murphy. “Ayudábamos a orientarlos para alejarlos de caer en el sistema de justicia juvenil haciéndolos participar en las actividades de la DSAL (como fútbol o boxeo) o en servicios de asesoramiento disponibles a través de la unidad de salud conductual de la oficina de servicios para jóvenes y familias de la ACSO. Intentamos identificar colaboradores y soluciones para mejorar cualquier situación que atraviesen los niños o con la que necesiten ayuda para resolverla”.
Durante la pandemia, cuando las escuelas dictaban clases remotas, el alguacil adjunto Murphy también fue instrumental para establecer un “Learning Hub” (centro de aprendizaje) gratis para los jóvenes. El centro de aprendizaje, ubicado en el parque de fútbol Canchitas, fue diseñado para ayudar a los niños a aprender, mantenerse activos y evitar el aislamiento social durante la pandemia. Canchitas (un campo de prácticas seguro construido por la ACSO y la DSAL en 2017) incluye dos canchas de fútbol callejero donde los niños pueden practicar y jugar durante los recesos del horario académico. Cabe destacar que el centro de aprendizaje de Canchitas también fue una grata ayuda para los padres que intentan hacer malabares entre el trabajo y la escolaridad de sus hijos en el hogar.
El alguacil adjunto Murphy espera que el trabajo que ha hecho en las escuelas y con los jóvenes haya creado una impresión positiva en la comunidad donde se desempeña, y que ayude a cambiar la percepción que tiene la gente de las autoridades policiales.
“Especialmente en estos tiempos, es importante que los niños vean el lado positivo de la autoridad policial y no el lado negativo que se transmite constantemente en los medios”, sostuvo. “Se trata de cambiar sus experiencias negativas o los conceptos negativos y convertirlos en positivos”.
El alguacil adjunto Murphy fue muy importante para REACH y nuestros colaboradores. Trabajó con H.A.R.D. (los operadores de Jack Holland Park), el distrito escolar, Ashland Little League y REACH para reunir amigos con el objetivo de favorecer cambios físicos, para que Ashland Youth Complex sea un lugar más seguro y mejor utilizado.
Somos un centro para jóvenes dentro de un parque público. Tener a alguien como el alguacil adjunto Murphy que estructure el espacio en torno al parque es sumamente importante, porque permite que REACH utilice mejor el espacio exterior.
Él ayudó a producir las mejoras físicas del campo de béisbol. Durante algún tiempo se veía bastante agreste, pero el alguacil adjunto Murphy pudo obtener fondos de la oficina del alguacil para resucitar esos campos.
También se ocupó del tema de los grafitis trabajando con H.A.R.D. para que se hiciera un mural permanente en una de las paredes, y esa es una mejor forma de resolverlo que tapar los grafitis con pintura constantemente. Su impacto no podría subestimarse.
Para mí está claro que uno puede ver que la inversión que se ha hecho en esta área da frutos. Porque hay un parque, pero si se viene abajo, o si solo es seguro durante ciertas horas, entonces no se perciben los beneficios totales que le ofrece un parque a su comunidad. El recurso se pierde. Lo que ha logrado la iniciativa de Community Capitals Policing en este caso es permitir que se utilice completamente como el parque imaginado.
Erik Sakamoto, MPA
Executive Director, REACH Ashland Youth Center